Marina Ovsyannikova estaba bajo arresto domiciliario por oponerse a la invasión.
Marina Ovsyannikova protestó en vivo contra la guerra de Ucrania en marzo pasado y pasó a ser reconocida mundialmente. Eso, quizá, le dio la posibilidad de seguir con vida y terminar en prisión domiciliaria. Hoy está “bajo la protección de un Estado europeo” dijo su abogado, sin dar demasiados detalles al respecto.
La periodista, exeditora de Canal 1, entró con un cartel contra la guerra en el noticiero en prime time y fue condenada a arresto domiciliario. Hace tres semanas, escapó de su detención y pasó a ser una de las personas más buscadas de Rusia.
Esta es la segunda huida de la periodista. Se había marchado a Alemania poco tiempo después de la protesta, pero regresó en Julio para recuperar a su hija. Extrañamente, su hija ahora fue dada en custodia a su exmarido y su paradero es desconocido.
Su arresto finalizaba el 9 de octubre, pero ella escapó a finales de septiembre, por lo que hay un mar de dudas de por qué decidió irse a tan pocos días de finalizar su arresto.
“Soy completamente inocente y, dado que nuestro Estado se niega a cumplir sus propias leyes, a partir del 30 de septiembre me he negado a acatar la medida cautelar de arresto domiciliario”, dijo en su último mensaje público.