Continúan las protestas en Francia por mejoras salariales y medidas compensatorias del poder adquisitivo de los trabajadores.
Un grupo de sindicatos franceses, liderado por la Confederación General del Trabajo, organizaron una huelga “intersectorial” ayer para reclamar subas salariales, en un continuación a los paros y cerca de 140 manifestaciones que se dieron desde septiembre en todo el país.
En un comunicado firmado por la CGT Fuerza Obrera, la Federación Sindical Unitaria, Solidario y cuatro organizaciones juveniles, pidieron la movilización “para el aumento de los salarios, de las pensiones y de los subsidios sociales y la mejora de las condiciones de vida y de estudios”.
Con gran mayoría de las gasolinerías sin carburante y las múltiples protestas, el transporte público se verá afectado, con el ferrocarril con problemas en las cercanías de París y el servicio reducido ya que circulan solo la mitad, según las previsiones de la compañía estatal SNCF.
A su vez, las líneas internacionales entre Francia y España se verán “ligeramente perturbadas”; y en paralelo, la educación también se verá afectada ya que se esperan cancelaciones de clases en primaria, secundaria y liceos profesionales.