Sigue la lista de oficialismos que cayeron post pandemia. El caso brasilero de mayor polarización y pelea.

El progresismo y centro izquierda avanza en América. Sin embargo, la centro derecha y los partidos un poco más radicalizados siguen absolutamente vivos. Por ejemplo, en Brasil, se puede simplificar como el ejecutivo para el PT, el parlamento para los liberales, y el poder judicial, un poco más inclinado a la izquierda, como decisor.

Sacando de lado, Nicaragua, Venezuela, y El Salvador que son “democracias” con tintes muy fuertes dictatoriales. Predominan hoy en américa los gobiernos de izquierda. Si nos centramos en Sudamérica, Uruguay, Paraguay y Ecuador son los únicos gobernados por coaliciones de centro derecha.

Sin embargo, Uruguay, con sus primeros cimbronazos y Paraguay con una gran aprobación de Abdo Benítez, parecieran que van derecho a continuar por lo menos un mandato más cuando lleguen las elecciones, en 2023 en Paraguay, en 2024 en Uruguay.

Lula va liderar una izquierda donde solamente mantiene su estatus el gobierno de Bolivia (a pesar de varias críticas) y con un principal aliado que no sería a priori Argentina, si no Estados Unidos. Y en Argentina necesitamos que Brasil sea nuestro primer socio comercial, sea quien sea el gobierno.

Las posibilidades de Argentina con Brasil

El gasoducto Néstor Kirchner es un ida y vuelta entre ambas naciones importantísimas. Ellos nos venden materiales, nosotros le vendemos gas. Ahora, Lula en su campaña hizo un lavado de cara absoluto, puesto que su principal argumento en contra fue la corrupción que supuestamente ocurrió durante su gobierno.  Un acercamiento hacia el gobierno kirchnerista tal vez no sea la mejor opción para el presidente electo.

Por otro lado, enfrenta una realidad totalmente distinta a la que enfrentó hace 20 años cuando asumía por primera vez el poder. Ahora, al lado de Alberto Fernández, Pedro Castillo y Gabriel Boric, Lula es por lejos el político más capaz por escándalo. Por ende, tendrá que liderar junto a AMLO y Arce la centro izquierda.

En el caso que el año que viene en Argentina vuelva a ganar el Frente de Todos, sea quien sea el encargado del ejecutivo, tendrá que estar a la altura de esas figuras políticas. A pesar de haber usado el término izquierda y derecha, debemos aclarar que ya son medio arcaicos. Podría ahora dividirse entre moderados y radicales, extremos y centros, republicanos y autoritarios. Con matices, de izquierda y derecha.

Por ende, Lula tiene varios frentes. Gobernar un país gigante y dividido. Con un parlamento en contra y con las expectativas puestas en ser el líder de américa latina, ante un Estados Unidos donde el partido demócrata está perdiendo todos los días, un poco su poder.