La Confederación General de Trabajo fue el bastión sobre el que sentó el que se fundó el peronismo se juntó con Wendy Sherman, la vice de Blinken el Secretario de Estado de los Estados Unidos de Norteamérica. Entre muchas visitas que hizo, en el marco de una fuerte revisión que el poderoso del norte está realizando en nuestro país, visitó a los muchachos. A pesar de que la funcionaria dijo que los “argentinos tienen que soportar sufrir a corto plazo” según informó La Nación, los representantes del pueblo trabajador se juntaron para buscar consensos según informó, el dirigente de la UOCRA, Gerardo Martínez según informó TELAM.
Lo raro es que las organizaciones sociales encabezadas por Juan Grabois arman una marcha en contra del FMI y que Daniel Menéndez dijo que haya que revisar el acuerdo con el FMI, mismo acuerdo que vino a apoyar la señora Sherman. Según Martínez “analizaron la situación socioeconómica argentina, la visión sindical respecto del dialogo social y la búsqueda de consensos orientados a mejorar las condiciones y calidad de vida de los sectores más postergados”, agregó la agencia de noticias estatal.
Peor aún, para Javier Lewskowicz en una nota en Página 12 dijo que la inflación se basa en “la aplicación de las medidas tomadas por el acuerdo con el FMI apoyadas por casi la totalidad de la oposición y compartida por el equipo económico de Massa”. Le faltó agregar acuerdo que en su momento el presidente salió a defender doblando papeles para mostrar solamente la parte del acuerdo que le convenía. Pero bueno, en aquel momento el gobierno estaba unido y era un solo gobierno. Ahora como dicen muchos comunicadores es el Frente de Todos contra Todos.
LA CGT DE UNOS POCOS
Luis Gasulla en su editorial del programa Disneylandia, que se emite por https://www.youtube.com/@newsba de 10 a 11 de la mañana de lunes a viernes, el trabajo en blanco no te saca de la pobreza. Ni cerca de sacarte de la pobreza aclararía yo. Cuestión que la semana pasada los boys de la confederation se juntaron con Sergio y arreglaron el no pago de ganancias de horas extras y otros adicionales para 600.000 mil trabajadores. Esto quiere decir, haciendo una cuenta rápida, que solo ese número de empleados en blanco cobra más de 815 dólares. Sin embargo, esto todavía no terminó de cerrarse y hay desconfianza. Sin embargo, a pesar de esto y que no descartan una marcha (sería el 2 de marzo) la cúpula de la Central van a apoyar una candidatura del ministro récord en inflación y que pide desesperadamente en Estados Unidos que le den un mango para poder calmar un poco las aguas.
La CGT representa lo más conservador del peronismo. Pero no o no solamente en un sentido ideológico. El organismo ascendió junto con Péron desde que era secretario de Previsión. Coaptó a los sindicatos disidentes, le dio la estructura de poder que lo coronó presidente y fue quien lo trajo del exilio (aunque haya varias versiones de esta historia). Fue también el lugar donde eligió refugio en su tercer mandato para salir de la embrujada Casa Rosada.
Hoy, según cuenta Nicolás Balinotti en su nota de La Nación, tomaron la visita de Wendy Sherman y el encuentro con ella como un reconocimiento a su rol de administradores en el conflicto social. Y además, que creen que la ayuda de Estados Unidos será fundamental para que el gobierno llegue estable al proceso electoral. En eso no se puede negar que tienen razón.
Ahora surge una pregunta ¿Quién representa a los trabajadores? La realidad es que hoy son unos pocos privilegiados los trabajadores que tienen protección sindical. Y no es culpa del monotributo, o del trabajo en negro, o por lo menos no es el total de la culpa. Si no que el poder sindical se fue trasladando lentamente, pero sin detenimiento, a las organizaciones sociales. Y estas no representan trabajadores, representan desocupados, reparten planes sociales, representan a la “economía popular”. Algunos de ellos con los que hemos podido hablar, dicen que son una transición entre perder el trabajo y llegar a un trabajo en blanco. La realidad es que en este país que cada vez hay más pobres y que el salario está más deteriorado, pareciera que estas organizaciones tienen cada vez más clientela, mientras que la CGT los pierde, por eso se acercan a Estados Unidos. ¿Y la CTA? Yasky está más preocupado por las causas judiciales de Cristina que por el 7.7 de inflación.
La realidad es que podrán combatir, o no, el capital, pero cada vez están perdiendo más a la gran masa del pueblo.