Tras varias negociaciones, el Gobierno llegó a un acuerdo respecto a la deuda de 44 mil millones de dólares que tenía el país y que vencía en marzo.
“El Gobierno de la Argentina ha llegado a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional”, anunció el presidente, desde la quinta de Olivos esta mañana, tras varias reuniones cuyos detalles técnicos quedaron a cargo del ministro de Economía, Martín Guzmán.
El presidente aseguró que este acuerdo no dispone de “saltos devaluatorios” y que “no restringe, no limita ni condiciona, los derechos de nuestros jubilados que recuperamos en el año 2020. No nos obliga a una reforma laboral. Promueve nuestra inversión en obra pública. No nos impone llegar a un déficit cero”.
También afirmó que “no impacta en los servicios públicos, no relega nuestro gasto social y respeta nuestros planes de inversión en ciencia y tecnología”, tampoco “habrá caída del gasto real”, pero si un “aumento en la inversión de obra pública del Gobierno Nacional”.
Frente a esto pidió al Congreso, apoyar este convenio del cual precisará los detalles el Ministro de Economía Guzmán junto al jefe de Gabinete, Juan Manzur, en una conferencia mientras que el board del FMI analizará el caso argentino en una reunión especial en Washington.
A su vez, dijo que “en comparación con otros anteriores que la Argentina firmó -y es bueno recordarlo- este acuerdo no contempla restricciones que posterguen nuestro desarrollo” y comentó que está “basado en la confianza del mundo en nuestras capacidades. Tenemos que crecer para poder pagar. De otro modo no era posible”.
Finalmente, concluyó que “la historia juzgará quién hizo qué. Quién creo un problema y quién lo resolvió”, en alusión a su antecesor, Mauricio Macri, quien pidió el préstamo de 45 mil millones de dólares al FMI en 2018.