Desde ayer Massa resuena en todos los medios, como resonó hace 3 semanas cuando finalmente fue el gran perdedor. Hoy pareciera ser el candidato del circulo rojo para estabilizar la situación. Pero hace meses que vivimos una operación atrás de otra por lo cual no hay ninguna certeza de nada.
Julio es el mes de los memes del famoso cantante Iglesias. Pero Argentina siempre supera todo. Pasaron tantas cosas que ni siquiera tiempo para las bromas gráficas hubo. Sin embargo, parece que va a terminar, como todos pensaron que iba a empezar tras la renuncia de Martín Guzmán. Con Massa en el gabinete.
Si esto sucede, solo se puede decir que la impericia del gobierno generó una gran lesión todos los argentinos. Según dicen las informaciones, de las cuales, se repite, no hay certeza, Batakis quedaría en el gabinete con un cargo menor. Entonces, ¿por qué fue ella a hablar con el FMI para renegociar los objetivos planteados para mantener el acuerdo, si apenas vuelve del viaje, otra persona asumiría el rol de ser quien conduzca los destinos económicos del país?
Massa recalaría en el gabinete siendo parte de la triple alianza de gobierno inicial. Sin embargo, el que tiene la lapicera, no tiene el poder. Si el ex intendente de Tigre desembarca como super ministro, ¿Alberto se revaloriza o se devalúa aún más?
Los desafíos que tiene la economía argentina son múltiples, pero se pueden resumir en tres áreas. Bajar la inflación, por decantación subir el poder adquisitivo del salario, fortalecer la moneda, y bajar el déficit para poder cumplir con el Fondo Monetario Internacional.
Para Vistage, solo el 7% de las empresas confían que la economía mejore para el año que viene, y solo el 50% cree que su rentabilidad no disminuirá. El 41% de los empresarios ven como el principal problema la incertidumbre.
Por su parte Zuban, Córdoba y Asociados, mostró una encuesta donde el 74% de los argentinos creen que la situación institucional y democrática del país es muy frágil. Prueba de esto, a la espera de las noticias sobre Sergio Massa, acaba de renunciar Gustavo Beliz, Secretario de Asuntos Estratégicos y uno de los últimos albertistas.
