Hola, para cambiar un poco la temática hoy voy a agarrar para el lado de la lectura. Ya hace años que comencé a interesarme en la literatura fantástica y de ciencia ficción. Así me adentré en diferentes autores, grandes distopias y reimaginaciones de la realidad y del futuro cercano que se nos viene encima. De esta manera fue que entre comentarios y recomendaciones llegué a la obra del autor chino Liu Cixin (Shanxi, 1963) y su uso de la ciencia dura para imaginar el futuro de la humanidad y las relaciones entre los seres.

La obra de la que hoy quiero hablar es una trilogía sobre la relación de los humanos con su inevitable finitud y lo extenso del universo sobre ellos mismos. Se la conoce como “La Trilogía de Los Tres Cuerpos” y está compuesta por los libros “El Problema de Los Tres Cuerpos” (2006), “El Bosque Oscuro” (2008) y “El Fin de La Muerte” (2010).

La historia comienza en el primer libro donde nos cuentan la vida de una científica durante la época de la Revolución Cultural China. Allí realiza una genial crítica al sistema político del país asiático pero no dando nada por sentado, al contrario le da valor a muchas cuestiones idiosincráticas de la cultura y pone en tela de juicio algunos métodos utilizados. Esta científica llamada Ye Wenjie, comienza a trabajar en un proyecto sobre comunicación con el espacio exterior. Su historia en el pasado, se verá poco a poco enlazada con la historia en el presente de otro científico que se ve involucrado en una conspiración que tiene como protagonista un video juego de realidad virtual sobre un planeta que tiene tres soles (denominado Trisolaris) y la forma en que sus habitantes podrán sobrevivir a épocas de deshidratación y épocas de estabilidad.

La forma en que Liu Cixin relata estas historias que van y vienen entre pasado y presente es simplemente atrapante y se vale de conceptos muy interesantes de verdadera ciencia. Aquí aparece la idea del problema de los tres cuerpos (los tres soles en los que orbita el planeta Trisolaris) y la idea de una antena transmisora que amplía su señal gracias a nuestro Sol. Sin caer en la idea del spoiler (ya que más allá del final, lo que importa en estas novelas es todo el recorrido), la comunicación con este planeta, que existe realmente, se lleva a cabo durante 60 años y se espera su arribo a nuestro sistema solar para una invasión dentro de 500 años, debido a la distancia que nos separa y la velocidad de sus naves intergalácticas.

En el segundo libro (mi favorito de la trilogía) se aborda con majestuosidad la idea del tiempo. La humanidad sabe que estos extraterrestres llegarán en 500 años, pero ¿cómo prepararse? 500 años es mucho y tanto la paciencia como la ansiedad juegan grandes roles. Quienes vivimos en el presente no llegaremos a esa época y seguramente nuestros hijos, ni nuestros nietos tampoco lo harán. La redacción de esta novela es perfecta, continúa siendo atrapante y adictiva como la anterior, pero agrega algo más: un protagonista con el cual uno se puede identificar totalmente, Liu Ji, una persona envuelta en algo que lo sobrepasa y que solamente quiere disfrutar de sus años de vida. Los conceptos del proyecto vallado y del bosque oscuro que aquí aparecen son algo increíble de descubrir mientras uno se sumerge en esta historia. Desde que terminé de leerlo no he parado de recomendarlo a todo aquel que me quiera escuchar.

La trilogía finaliza en “El Fin de La Muerte” en donde volvemos a la época actual y seguimos a una protagonista femenina muy fuerte, Cheng Xi, pero con la cual no me sentí tan identificado como con el de la anterior novela. Ella atravesará muchas épocas valiéndose de la criogenia, tendrá que ocupar un lugar de suma importancia para la humanidad al llegar los visitantes trisolarianos a nuestro sistema solar y luego recorrerá gran parte del universo intentando hallar dos cosas: el amor y el sentido de la vida.

Sin dudas la lectura de toda la trilogía es una experiencia que recomiendo totalmente a cualquier amante o seguidor de la ciencia ficción. Lo que hace Cixin Liu con el uso de la ciencia dura para valerse de herramientas para su obra y como lo va relacionando con situaciones reales de las sociedades humanas actuales (y pasadas, y futuras también) es algo que me atrapó totalmente. El segundo libro es de una hermosura increíble e incluso se toma el tiempo de construir sus personajes de forma detallada, increíble y fascinante. Creo que esa es la razón por la cual se logra empatizar tanto con el vallado Liu Ji, su causa y su vida a lo largo de todos los siglos.

Luego leí un par de cosas más del autor, unos relatos cortos y cuentos varios, pero allí sentí que caía en un par de clichés utilizados en estas novelas y se volvía reiterativo en su estructura narrativa. Por supuesto que sin dejar de tenerte atrapado desde la primer palabra hasta la última de cualquiera de sus historias.

Al parecer la plataforma de streaming de series y películas más famosa de la actualidad (la de la N roja) está llevando adelante la producción de una adaptación a serie de toda la trilogía. Quizás sirva para atraer más lectores a esta fantástica aventura y que pueda hacerle honor a la majestuosidad de la obra en su totalidad. Si ustedes son como yo, antes de que esa adaptación llegue, háganse el favor de leer la trilogía entera y después podremos compartir las sensaciones que la misma nos dejó. Sin lugar a dudas creo que les va a cambiar la percepción del tiempo y de la humanidad. Como siempre les invito a pasar por las diferentes redes en donde comparto cosas y donde me pueden encontrar como @elmo.uy. Mi nombre es León Barzi, esto fue ELMO. Salú!