La firma del acuerdo quedó en suspenso luego de que el presidente rechazará exigencias del Fondo respecto a ajustes económicos.
El Gobierno y el FMI discrepan respecto a la reducción de los subsidios a la energía, ya que a los técnicos del Fondo nos les convence la falta de solidez del sendero fiscal, por lo que se postergó el acuerdo y exigen más ajuste en el gasto público antes de firmar.
El presidente rechazó esta exigencia, durante una reunión a solas que tuvo ayer con el ministro de Economía y Finanzas Públicas de la Nación, Martín Guzmán, en la Quinta de Olivos; por lo que es posible que se dé una reunión urgente entre Alberto Fernández y la directora gerente del Fondo, Kristalina Georgieva, para encontrar una solución a esta cuestión técnica-política.
El acuerdo ya lleva varios meses de negociación en Washington, Roma, Venecia y Buenos Aires, durante lo que el mandatario se comprometió a cumplir con el staff y el board del FMI en un sendero fiscal que reduce el déficit para los próximos años, lo que no implicaba un ajuste económico ya que daba la posibilidad de crecimiento sostenido.
A su vez, la Casa Blanca expresó claramente, hace varios días en una reunión informal, que había una decisión política de acompañar a Argentina para que pueda refinanciar la deuda contraída por Mauricio Macri en 2018.
Sin embargo, el presidente ordenó a Guzmán a rechazar las exigencias ya que no avalará un aumento mayor al 20% en el ajuste de la economía. “De ahí no nos movemos”, determinó un miembro del gabinete al tanto de todos los detalles de las negociaciones.