Triple choque y vuelco en Palermo: un Audi perdió el control y destruyó dos autos estacionados

El accidente ocurrió durante la madrugada del domingo en la intersección de Godoy Cruz y Soler. El conductor perdió el control del vehículo, impactó contra dos autos estacionados y terminó volcando. Fue trasladado al hospital Rivadavia con heridas leves.

Policiales05 de octubre de 2025Alejandra LarreaAlejandra Larrea
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La tranquilidad habitual de la madrugada en Palermo se rompió con el estruendo de un fuerte impacto. Un Audi gris perdió el control a gran velocidad, embistió a dos vehículos estacionados y volcó en plena calle, dejando un escenario de destrucción que sorprendió a los vecinos de la zona.

El siniestro se produjo pasadas las 2 de la mañana en la esquina de Godoy Cruz y Soler, un punto de tránsito frecuente en el barrio porteño, cercano a bares, restaurantes y zonas residenciales. Testigos relataron que el vehículo circulaba a gran velocidad y que, tras golpear el cordón, rebotó contra dos autos estacionados antes de quedar dado vuelta sobre la calzada.

La secuencia del accidente
Las cámaras de seguridad de la zona registraron el momento exacto del impacto. En las imágenes se observa cómo el Audi A3 pierde estabilidad al intentar girar, golpea contra un Volkswagen Polo y un Peugeot 208 estacionados, y termina volcando de costado.

A los pocos minutos, los vecinos salieron a la calle alarmados por el ruido. Algunos se acercaron para asistir al conductor, que logró salir del vehículo por sus propios medios. Presentaba cortes y golpes visibles, pero se encontraba consciente.

El SAME acudió rápidamente al lugar y lo trasladó al Hospital Rivadavia, donde fue atendido por politraumatismos leves. Las primeras pericias indican que el siniestro no involucró a otros conductores ni peatones.

Daños materiales y operativo de rescate
El impacto provocó serios daños en los autos estacionados y en la carrocería del Audi, que quedó completamente destruido en su parte frontal. Restos de vidrios y piezas del motor quedaron esparcidos por toda la calzada.

Efectivos de la Policía de la Ciudad y de Bomberos del Cuartel VII trabajaron durante más de una hora para retirar el vehículo y limpiar el área. El tránsito estuvo interrumpido sobre Godoy Cruz entre Guatemala y Honduras, mientras se realizaban las pericias correspondientes.

Según los primeros informes, no se hallaron rastros de alcohol en sangre, aunque se aguarda el resultado del examen toxicológico para confirmar las condiciones del conductor al momento del accidente.

Una zona de tránsito riesgoso
El cruce donde ocurrió el siniestro es uno de los puntos del barrio que acumula reclamos vecinales por exceso de velocidad. La ausencia de reductores y el tránsito fluido durante la noche convierten a la zona en un punto crítico, especialmente los fines de semana.

Vecinos señalaron que los accidentes leves son frecuentes y que el peligro se acentúa con el movimiento nocturno. “Venimos pidiendo hace tiempo que se coloquen lomos de burro o semáforos con tiempos más cortos”, explicaron quienes viven en el entorno.

Palermo, uno de los barrios con mayor densidad de locales gastronómicos y circulación de autos particulares, se ha convertido en un punto donde los siniestros viales se repiten. Según datos del Observatorio de Seguridad Vial de la Ciudad, en lo que va del año hubo más de 800 incidentes en la zona, la mayoría durante la noche o madrugada.

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Conmoción y debate
El episodio reavivó el debate sobre la velocidad, el consumo de alcohol y la falta de controles en los corredores nocturnos porteños. En redes sociales, las imágenes del vehículo volcado se viralizaron rápidamente, acompañadas de mensajes que reclaman mayor presencia policial y controles de tránsito más rigurosos.

El caso quedó en manos de la Fiscalía de Flagrancia Norte, que ordenó pericias al vehículo y tomará declaración al conductor una vez que reciba el alta médica.

Mientras tanto, los dueños de los autos dañados intentan recuperar sus vehículos, en medio de un paisaje de chapa retorcida, vidrios y restos del siniestro.

El triple choque de Palermo dejó un saldo afortunado: no hubo víctimas fatales ni heridos graves. Sin embargo, el episodio vuelve a exponer la combinación peligrosa de velocidad, distracción y exceso de confianza que sigue cobrando protagonismo en las calles porteñas.

 


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