Choque violento en Parque Avellaneda: un auto volcó y tres adultos sufrieron politraumatismos graves

Una madrugada que había comenzado con calma en el barrio porteño de Parque Avellaneda se transformó en una escena de alta tensión y drama. En la intersección de Pergamino y Tandil, una Renault Duster impactó al Fiat Palio que circulaba en sentido contrario, provocando el vuelco total del segundo vehículo. La fuerza del impacto dejó el Palio destrozado en medio de la calzada, mientras la Duster exhibía el frente completamente destruido, una postal de la violencia del siniestro.

A pesar del vuelco, los ocupantes —dos mujeres y un hombre— lograron salir por sus propios medios antes de que llegaran los rescatistas. Sin embargo, el estado de sus lesiones encendió la alarma: se les detectó politraumatismos, lo que motivó la activación inmediata del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME). Hasta el lugar llegaron siete móviles médicos y una dotación de bomberos, quienes aseguraron la escena, prestaron primeros auxilios y coordinaron la evacuación al Hospital Piñero.

Las tareas de rescate y asistencia se completaron con rapidez, y los heridos fueron trasladados bajo custodia médica, ya con pronóstico inicial reservado pero fuera de peligro inminente. El despliegue de las fuerzas de emergencia demostró una articulación efectiva ante una emergencia vial de alta gravedad.

Este choque se suma a una creciente lista de siniestros viales que ensombrecen el tránsito urbano, especialmente en zonas densamente pobladas. Si bien no se dieron detalles sobre la mecánica precisa del choque, las imágenes recogidas en el lugar muestran la violencia del impacto y el trabajo coordinado de ambulancias y personal de emergencias para garantizar la atención oportuna.

El episodio deja una vez más la alerta encendida: la ciudad, con su tránsito caótico, sigue confrontando accidentes que pueden terminar en tragedia si no se refuerzan inversiones en infraestructura vial, señalización clara y controles efectivos.