Milei restituyó el Ministerio del Interior y Lisandro Catalán asumió como su titular

En la mañana del lunes 15 de septiembre, Javier Milei encabezó en el Salón Blanco de Casa Rosada la ceremonia de jura de Lisandro Catalán, designado oficialmente como ministro del Interior. La asunción se dio luego de que el Poder Ejecutivo restableciera el rango ministerial de la cartera, que había sido degradada a Secretaría en 2024 durante la primera etapa de gestión.

Con el decreto 658/2025 se reformó la Ley de Ministerios para volver a incluir Interior dentro del organigrama oficial. Paralelamente, el decreto 672/2025 oficializó a Catalán al frente del área, con facultades plenas y la responsabilidad de llevar adelante la coordinación política con provincias y municipios.

El flamante ministro tiene por delante un papel clave: recomponer los vínculos con los gobernadores, reforzar la presencia federal y garantizar la instrumentación de la llamada Mesa Federal, un espacio de diálogo político que será central en los próximos meses. Además, la cartera tendrá bajo su órbita áreas sensibles como el Registro Nacional de las Personas, migraciones, política ambiental, turismo y deporte, además de funciones vinculadas al régimen electoral.

El Gobierno nacional decidió acelerar estos cambios luego de la derrota en las elecciones de la Provincia de Buenos Aires, donde La Libertad Avanza no logró sostener el caudal esperado. En ese contexto, el restablecimiento del ministerio busca transmitir un mensaje de apertura al federalismo y de mayor coordinación con los gobiernos provinciales, que en las últimas semanas intensificaron reclamos por recursos, obras y financiamiento.

Durante el acto, Catalán agradeció la confianza del presidente y aseguró que trabajará para “fortalecer las instituciones, promover un vínculo más directo con los mandatarios provinciales y hacer del federalismo una práctica concreta y no solo una declaración de principios”. El funcionario, abogado de formación y con experiencia previa como vicejefe de Gabinete a cargo de Interior, se perfila como uno de los hombres fuertes en la nueva etapa del Ejecutivo.

La reestructuración también incluyó cambios en la Jefatura de Gabinete. Se estableció la figura de un Vicejefe Ejecutivo con rango ministerial, al que se le asignarán funciones específicas de coordinación parlamentaria, control presupuestario y supervisión de políticas públicas, para aliviar la concentración de tareas en la Jefatura central.

El regreso del Ministerio del Interior fue bien recibido en varios despachos provinciales, aunque algunos gobernadores todavía observan con recelo la manera en que se manejarán los Aportes del Tesoro Nacional y otros fondos discrecionales. En los primeros días tras la decisión, ya se anunciaron transferencias puntuales hacia distintas jurisdicciones, interpretadas como un gesto inicial para recomponer la confianza política.

Con la asunción de Lisandro Catalán, el Ejecutivo busca dar una señal clara de que necesita reordenar la relación con las provincias, en momentos donde el Congreso también se prepara para discutir los vetos presidenciales a leyes de financiamiento universitario y de salud. El desafío será mantener la cohesión interna y mostrar que el discurso federal puede convertirse en hechos concretos.