Chile cierra el mercado para carne argentina tras cambios sanitarios del Senasa

El vecino país suspendió la importación de carnes y productos animales tras la flexibilización argentina de la barrera sanitaria patagónica, generando alarma en exportadores y productores regionales.

Economía06 de agosto de 2025Alejandra LarreaAlejandra Larrea
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Suspensión de importaciones decidida por Chile

Una decisión inesperada encendió alarmas en el sector agroexportador: Chile suspendió oficialmente las compras de carne y productos de origen animal desde varias regiones patagónicas argentinas. La medida supera lo comercial: responde a la reciente autorización del Senasa para permitir el ingreso de carne con hueso en zonas que Chile reconocía como libres de fiebre aftosa sin vacunación.

Lo que cambió en la normativa argentina

En junio de 2025, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) aprobó la Resolución 460/2025, que permite el traslado de carnes con hueso—como costillar, asado o esternón—desde regiones argentinas clasificadas como libres con vacunación hacia la Patagonia. Esa zona contaba hasta entonces con estatus especial, reconocido por Chile desde 2008. La nueva norma rompió ese esquema sanitario que justificaba el comercio exterior con el país vecino.

Reacción del gobierno chileno

El 30 de julio, el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Chile emitió la Resolución 5952/2025, revocando el reconocimiento como “zona libre de fiebre aftosa sin vacunación” a territorios claves en Neuquén y Río Negro. En consecuencia, suspendió todas las importaciones desde Argentina de carne bovina, ovina, caprina, porcina y aviar, así como derivados lácteos, vísceras, grasa y productos similares contemplados en ese régimen.

Impacto regional inmediato

La suspensión afecta territorialmente a la Patagonia Norte y zonas limítrofes que hasta hoy proveían cortes premium y ganado reproductor hacia Chile. La medida cayó como una bomba para productores regionales, frigoríficos y asociaciones rurales que vieron su principal destino comercial cerrado sin aviso previo ni consulta formal. La Federación de Sociedades Rurales de Río Negro denunció que este giro fue implementado sin diálogo a nivel local.

Consecuencias económicas

Chile representa un mercado estratégico para la carne patagónica, especialmente para el negocio ovino. La suspensión compromete exportaciones millonarias, reduce la previsibilidad comercial y deja en riesgo cadenas productivas que emplean a cientos de pequeños productores y comunidades del sur del país.

En localidades como Neuquén y Río Negro se teme que el efecto se extienda a cadenas asociadas: transporte, logística frigorífica y mercados de exportación, que dependerán ahora de negociaciones o auditorías técnicas para restituir el comercio.

Qué resta por delante

La medida chilena entrará en vigencia tras su publicación en el Diario Oficial de Chile. Se espera que el país vecino envíe una misión sanitaria en septiembre para evaluar el nuevo estatus del sistema patagónico. Fuentes oficiales expresaron que la suspensión es "precautoria y temporal" hasta que esa misión se complete, pero advierten sobre el riesgo de que otros mercados, como el europeo, adopten postura similar.

Mientras tanto, el gobierno argentino mantiene canales diplomáticos y técnicos abiertos, aunque hasta ahora sin pronunciamiento oficial público.

La suspensión de importaciones decidida por Chile tras la flexibilización sanitaria argentina representa un golpe duro al sector cárnico de exportación. Una política interna pensada para dinamizar el mercado doméstico terminó provocando fractura del estatus sanitario reconocido internacionalmente. El costo recae sobre las economías regionales patagónicas, que ahora enfrentan cierre abrupto de mercado y desafíos comerciales sin precedentes.

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