El “jefe de los Copitos” negó haber sabido del plan contra Cristina Kirchner

El intento de asesinato contra Cristina Kirchner en 2022 volvió a los tribunales con nuevas declaraciones de los acusados. En este caso, el denominado “jefe de los Copitos”, grupo señalado como núcleo de apoyo logístico a Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte, negó haber estado al tanto de los planes para atentar contra la vicepresidenta.

Su testimonio buscó marcar distancia del hecho que conmocionó al país, mientras la Justicia intenta establecer el verdadero grado de responsabilidad de cada integrante de la banda.

En la audiencia, el imputado aseguró que nunca supo que existía una intención de asesinar a Cristina Kirchner y que su vínculo con los demás acusados estaba limitado a la venta ambulante de copos de azúcar en distintos eventos. Según su versión, el grupo no funcionaba como una organización criminal sino como una actividad económica informal para obtener ingresos.

La fiscalía, sin embargo, sostiene que los Copitos tuvieron un rol central en la preparación logística del ataque. Se investiga si facilitaron recursos, contactos y cobertura para Sabag Montiel y Uliarte, quienes fueron captados en videos y pruebas directas en torno al atentado.

El acusado buscó desmarcarse también de las conversaciones encontradas en los teléfonos, que revelan charlas sobre violencia política. Argumentó que se trataba de “exageraciones” o “bromas de mal gusto”, y que nunca creyó que se materializaría un plan real contra la vicepresidenta.

El tribunal deberá evaluar la consistencia de estos dichos frente a la cantidad de pruebas recolectadas en la causa, que incluyen mensajes, audios y testimonios que vinculan al grupo con la planificación del ataque.

La defensa del imputado apunta a que se lo desvincule del cargo de tentativa de homicidio agravado, buscando una imputación menor. La fiscalía, en cambio, considera que la magnitud del caso requiere sanciones ejemplares para todos los involucrados.

El juicio por el atentado a Cristina Kirchner sigue sumando capítulos, con declaraciones que intentan reconfigurar el rol de cada acusado. La negación del “jefe de los Copitos” será ahora evaluada por el tribunal, que deberá determinar si se trató de un intento de despegarse de la causa o si efectivamente su participación fue menor a la señalada por la investigación.