Vaca Muerta bajo control: el gobierno frena el paro con conciliación obligatoria

La Secretaría de Trabajo dictó la conciliación obligatoria por 15 días en el paro de los petroleros de Río Negro, Neuquén y La Pampa. La medida busca garantizar la producción y evitar desabastecimiento.

Economía30 de julio de 2025Alejandra LarreaAlejandra Larrea
file_00000000020061f593dfeed99e1093ae
Vaca Muerta bajo control.

El Gobierno nacional intervino con rapidez para impedir una huelga que amenazaba con paralizar la actividad en uno de los principales polos de energía del país. A través de la Secretaría de Trabajo, se dictó la conciliación obligatoria en el conflicto por despidos y suspensiones en Vaca Muerta, vigente desde esta mañana por 15 días. Durante ese plazo, los trabajadores deben mantener el servicio y retomar sus tareas normalmente.

El paro había sido anunciado para el 30 y 31 de julio por el Sindicato de Petroleros Privados de Río Negro, Neuquén y La Pampa, en respuesta a más de mil despidos y dos mil suspensiones. La medida buscaba presionar por reincorporaciones y mejores condiciones salariales, especialmente frente al avance de reestructuraciones en yacimientos clave.

La conciliación obligatoria comenzó a regir al mediodía con el objetivo de preservar la paz social y evitar el impacto negativo sobre la producción de gas y petróleo no convencional. El Ministerio de Capital Humano espera que el gremio y las empresas utilicen este periodo para avanzar en un acuerdo sin interrumpir operaciones.

El sindicato, liderado por Marcelo Rucci, ya comunicó oficialmente que acata la medida y suspende toda acción directa. Destacaron que la medida regía en un momento de récord de producción, con cerca de 600.000 barriles diarios, pero sin mejoras salariales efectivas para los trabajadores.

Las empresas del sector argumentan que la reestructuración responde a ajustes previstos en modelos de explotación, aunque el gremio insiste en que las decisiones de suspensión son injustificadas.

Durante los 15 días que dura la conciliación, se espera la convocatoria de ambas partes a audiencias en la sede laboral, con el objetivo de negociar despidos, suspensiones y condiciones contractuales. La ley establece que, en ese lapso, está prohibida cualquier medida de fuerza, incluyendo transporte de personal o modificación en turnos productivos.

Esta resolución también busca evitar que aumenten los despidos como efecto dominó del conflicto, y los gobiernos provinciales respaldan el llamado al diálogo ante el riesgo de mayor tensión social y económica.

La intervención estatal abrió un nuevo capítulo en la disputa petrolera: se impuso una pausa legal para evitar mayores daños al abastecimiento y acercar posiciones. El avance de las negociaciones durante este período será clave para definir si se logra un acuerdo real o si el conflicto vuelve a escalar al vencer la conciliación.

Te puede interesar
Lo más visto