Meta de reservas flexibilizada y nueva apuesta económica: Caputo renegocia el cronograma con el FMI

El objetivo original que exigía casi USD 8.900 millones hasta fin de año fue ajustado a números más realistas. A cambio, se sumará más exigencia en el cronograma a partir de 2026.

Economía01 de agosto de 2025Alejandra LarreaAlejandra Larrea
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Apuesta económica.

En una intervención pública, el ministro de Economía detalló que las metas pactadas con el FMI fueron redefinidas: este año la exigencia será significativamente menor, con el compromiso de compensar el déficit en los próximos dos años.
La decisión forma parte de la primera revisión técnica del acuerdo Extended Fund Facility, que también autorizó el desembolso inmediato de USD 2.000 millones pese al incumplimiento parcial de reservas.

Luis Caputo explicó que la meta original establecía una acumulación de USD 8.900 millones entre marzo y diciembre, pero que tras renegociar con el FMI el nuevo compromiso se reduce en USD 5.000 millones. «Es algo mucho más lógico» y compatible con el funcionamiento real del esquema económico, sostuvo.

El ajuste permite aliviar la presión sobre el Banco Central y facilitar la reentrada de Argentina en los mercados internacionales de capital, según explicó el ministro. A cambio, se acordó que en 2026 la exigencia será superior, para compensar el menor ritmo de acumulación este año.

El Fondo Monetario, en su declaración oficial tras aprobar el desembolso de USD 2.000 millones, reconoció que no se cumplió con la meta de reservas establecida para junio. Sin embargo, valoró el cumplimiento de otros criterios clave como el superávit fiscal y las medidas correctivas adoptadas para acercarse progresivamente al objetivo original.

Parte de ese nuevo desembolso será destinado a cubrir un vencimiento con el propio FMI, que reduce significativamente el ingreso neto de divisas. En paralelo, el Tesoro ya adquirió alrededor de USD 1.500 millones para reforzar el margen operativo del BCRA.

El cronograma original del programa exigía que el BCRA aumentara sus reservas en USD 4.400 millones para junio, una meta que no se alcanzó. La adecuación del calendario busca evitar incumplimientos formales y mantener la credibilidad ante inversores externos.

El ajuste también fue presentado como una señal de pragmatismo financiero: el tipo de cambio flota libremente dentro de bandas, y las políticas monetarias adoptadas —como la eliminación de la tasa de referencia del BCRA y el uso intensivo de operaciones Repo— buscan controlar la inflación y restablecer reservas con mínima intervención directa.

La renegociación de las metas de reservas representa un giro estratégico para Argentina: permite evitar incumplimientos técnicos sin desmantelar el compromiso con el programa del FMI. Al equilibrar exigencia y realidad macroeconómica, apunta a mejorar la percepción internacional, garantizar solvencia financiera y sostener la estabilidad hacia el 2026, cuando la acumulación deberá intensificarse para compensar la menor exigencia de este año.

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