Lo secuestraron y torturaron tras una trampa, pero logró escapar de milagro

Un hombre fue engañado con una cita, reducido por un grupo armado y sometido a horas de violencia extrema. Aprovechó un descuido de sus captores para huir y pedir ayuda.

Policiales23 de agosto de 2025Alejandra LarreaAlejandra Larrea
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Secuestro y tortura.

Lo que parecía un encuentro rutinario terminó en una pesadilla. Un hombre fue secuestrado y brutalmente torturado en las afueras de la ciudad, luego de haber sido atraído con una trampa cuidadosamente planificada. El ataque, ejecutado por un grupo armado, lo mantuvo cautivo durante horas hasta que encontró la oportunidad de escapar.

El caso conmociona por el nivel de violencia aplicado y por la sangre fría de los agresores, que lo golpearon, lo amenazaron de muerte y lo dejaron al borde del desmayo en un galpón improvisado.

Según la reconstrucción judicial, todo comenzó con una cita pactada mediante un contacto conocido. El hombre fue conducido hacia un domicilio en las afueras de la ciudad, donde lo esperaba un grupo de entre tres y cuatro personas armadas. Apenas ingresó, fue reducido, maniatado y sometido a una golpiza feroz.

Los captores utilizaron golpes, quemaduras y amenazas para obtener información y dinero. La víctima permaneció cautiva durante varias horas, encerrada en una habitación oscura y custodiada de manera intermitente. En ese contexto, sufrió torturas físicas y psicológicas que le dejaron marcas visibles en el cuerpo y un trauma emocional profundo.

El escape se produjo gracias a un descuido de los secuestradores, que dejaron sin cerrar una de las puertas mientras discutían entre ellos. Aprovechando ese instante, el hombre logró desatarse parcialmente y huyó corriendo hacia la calle. Descalzo y ensangrentado, pidió auxilio a los vecinos, que inmediatamente dieron aviso a la policía.

Las fuerzas de seguridad montaron un operativo en la zona y allanaron el lugar donde había estado cautivo. Allí encontraron restos de sogas, palos y elementos utilizados para las torturas. Los sospechosos alcanzaron a escapar, aunque fueron identificados y ya cuentan con pedido de captura.

La víctima fue trasladada a un hospital, donde recibió atención médica por las lesiones sufridas y asistencia psicológica. Actualmente se encuentra fuera de peligro, aunque con heridas que demandarán varios días de recuperación.

El caso fue caratulado como “privación ilegítima de la libertad agravada y torturas”, un delito que contempla penas de prisión de cumplimiento efectivo. La fiscalía a cargo de la investigación busca establecer si se trató de un ataque puntual o si forma parte de una organización dedicada a secuestros extorsivos.

El dramático testimonio de la víctima y las pruebas halladas en el lugar confirman la brutalidad del secuestro. La historia tuvo un desenlace con vida gracias a la astucia del hombre para escapar, pero dejó en evidencia un escenario de violencia alarmante. Ahora, la Justicia deberá avanzar contra los responsables y esclarecer si detrás de la trampa hay una red criminal más amplia.

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