Coimas en la ANDIS: allanaron Nordelta y secuestraron las grabaciones de seguridad

La investigación por las presuntas coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) sumó un nuevo capítulo con el allanamiento en Nordelta, el exclusivo complejo de Tigre donde residía el empresario Jonathan Kovalivker, directivo de la droguería Suizo Argentina. La Justicia dispuso el secuestro de grabaciones de las cámaras de seguridad para reconstruir el movimiento de personas vinculadas a la trama de corrupción.

El operativo estuvo a cargo de personal judicial y de fuerzas federales, que ingresaron a distintas unidades del barrio cerrado con el objetivo de obtener registros fílmicos. Los investigadores buscan identificar visitas, reuniones y posibles contactos de Kovalivker y otros implicados durante los meses en que se negociaban licitaciones bajo sospecha.

La causa gira en torno a un presunto esquema de cobro de sobornos para direccionar contrataciones en la compra de medicamentos y equipamiento. Los audios filtrados dieron origen al expediente que hoy compromete a empresarios y funcionarios vinculados a la agencia.

El secuestro de las grabaciones apunta a consolidar pruebas sobre la frecuencia de reuniones en Nordelta y la participación de terceros que aún no fueron indagados. Según trascendió, la Justicia también evalúa citar a nuevos testigos y avanzar en imputaciones adicionales.

En paralelo, la tensión política crece: la oposición exige que se conforme una comisión investigadora en el Congreso para auditar las contrataciones, mientras el Gobierno intenta contener el costo político de un escándalo que ya alcanzó a figuras del círculo más cercano al oficialismo.

El allanamiento en Nordelta y el secuestro de las grabaciones de seguridad marcan una nueva fase en la causa de las coimas en la ANDIS. Con pruebas en análisis y la posibilidad de más imputaciones, la investigación avanza hacia un terreno cada vez más sensible que combina la trama judicial con repercusiones políticas de alto voltaje.